Sobre el Libro “Sonetos de las Verdes Verduras”
Editorial por José Tlatelpas
Este libro que hoy presentamos nos muestra una interesante faceta de Juan Cervera, quien defiende una herencia contra el mester de clerecía, a favor de la libertad del canto como el pueblo lo siente; pero ceñido de las formas clásicas y, especialmente, de la métrica española. Este libro hace una celebración a las verduras de una manera humorística, profana y etnológica. Elementos de las canciones populares de la campiña andaluza se encuentran con plantas propias del continente americano.
Juan Cervera ha publicado un gran número de libros y plaquettes, así como entrevistas y comentarios culturales durante su ya larga trayectoria. Durante su carrera ha entrevistado a un gran número de personajes de la cultura que hoy forman parte de la historia y nuestra herencia cultural.
A pesar de su afición y lealtad por las formas populares, quizá lo más reelevante de la obra de Cervera son precisamente las excepciones a esta postura; muchos de sus textos (no incluídos en este pequeño libro que hoy publicamos) tienen un innegable sabor gongoriano, futurista, definitivamente surrealistas o cercanos a las propuestas intelectuales de la España de Lorca, Machado y otros escritores.
En este libro sobre las verduras Cervera canta a la verdolaga, al aguacate, a la zanahoria, la cebolla y la lechuga, entre otras verduras. Podemos ver en su trabajo la postura intelectual de retomar el tema de lo cotidiano, de incluir una temática esencial en su obra, el manejo limpio del soneto y la versificación en castellano pero también un dejo del humor de Sancho Panza, del jolgorio popular, de la irreverencia del trabajador del campo que se unen y se desprenden del escritor, del intelectual y del sabio jinete de la métrica y el ritmo.
De repente los estribillos de estos cantos populares, empaquetados en sonetos, tienen reminiscencias de otras culturas, vemos resonancias de la poesía árabe y sefardita, de la cultura africana y una coincidencia insólita con el budismo zen. Quizá hay que leer estos sonetos con una actitud alegre, y , de ser posible, quizá tomando una buena botella de vino entre un grupo de amigos y bandidos en una abrupta serranía, admirando el grácil caminar de las pastoras y con el ánimo de disfrutar el sol, divertirse y admirar los colores del atardecer. En otras palabras, disfrutar la profunda calidez de lo más intimo y sencillo, la poesía y la cordialidad entre los pueblos.
Juan Cervera Sanchís nace en villa axatiana (Axati), hoy Lora del Río, Sevilla, el 24 de octubre de 1933, por lo que es andaluz, coplero y rebelde cantador. Su padre Juan Cervera Rueda, fue asesinado por las hordas fascistas de Francisco Franco. En la misma plaza de la tragedia, el pueblo de Lora del Río ha levantado una estatua de homenaje a su hijo Juan Cervera Sanchís. Y también se ha creado un premio nacional de poesía que lleva su nombre. En España, la conocida colección Adonais publicó su libro “El Prisionero” (1970). Obtuvo en Barcelona el premio internacional Azor con el libro “En las Nubes”, 1982.
Brindemos con vino y regocijo la prístina sencillez de su poesía.
Ediciones Bohodón, en Madrid, ha publicado 3 volúmenes con las obras completas de Juan Cervera Sanchís.
http://bohodon.net/publicaciones/CerveraI.html